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Tiene una población de 800.000 habitantes, más de 400.000 bicicletas, cuenta con unos 15.000 kilómetros de carril bici y destaca como la ciudad más sostenible del mundo, según el Índice de Ciudades Sostenibles 2024 elaborado por Arcadis. ¿Sabes de qué ciudad se trata? Ámsterdam ocupa además la sexta posición en el Global Power City Index 2023 y la octava en el índice IESE Cities in Motion, dos rankings que evalúan las ciudades más avanzadas en sostenibilidad y calidad de vida.

En 2017 ya fue pionera al crear la primera granja vertical comercial de Europa. La empresa Staay Food Group, ubicada en Dronten, abrió sus puertas cultivando lechugas en un área de 3.000m2 distribuidos en tres niveles, utilizando el modelo hidropónico que sumerge las raíces en agua. Esto le permitió producir alimentos frescos y sostenibles, reducir la huella de carbono asociada al transporte de productos y. en tan solo siete años, ampliar su producción para incluir variedades como Salatrio, Salanova roja y verde, y lechuga Butter.

Ámsterdam Smart City

Conocida como “la Venecia del norte”, en la actualidad impulsa proyectos de innovación y sostenibilidad para convertirse en una ciudad totalmente circular e inteligente en el año 2050. A través de la iniciativa Ámsterdam Smart City se busca promover el crecimiento económico sostenible y fomentar el desarrollo de nuevas tecnologías.

¿Cómo lo va a conseguir? ¡Estas son sus estrategias!

  • Más de 500 hogares equipados con contadores inteligentes y dispositivos informativos para aumentar la conciencia energética.
  • Creación de centros de trabajo inteligentes para reducir desplazamientos largos y mejorar la calidad de vida.
  • Fomento de la movilidad limpia mediante la optimización de energías renovables y el uso de vehículos eléctricos.
  • Reciclaje en el sector de la construcción, con el objetivo de reducir el uso de nuevas materias primas en un 50% para el año 2030 y alcanzar la completa circularidad para 2050.

El caso Buiksloterham

Este barrio postindustrial al norte de Ámsterdam será el primer barrio circular de la ciudad. Históricamente destinado a zona industrial, aunque céntrico y de fácil acceso, completamente transformado para convertirse en un barrio residencial y laboral. El desafío es claro: construcción de edificios con madera reutilizada para reducir las emisiones de CO2, casas flotantes recicladas para adaptarlas en tierra, consumo del 100% de electricidad renovable, calefacción y agua caliente, gestión del 100% de aguas residuales y aumentar la producción local de alimentos de un 10% al 30%.

¿Es viable? Pues si todos estos avances tecnológicos funcionan, es muy probable que Ámsterdam logre convertirse en una ciudad completamente circular y sostenible para el año 2050. Esto significaría que se usarían todos los recursos de manera inteligente, cuidando el medio ambiente y asegurando una buena calidad de vida para sus habitantes. ¿Crees que lo conseguirá? ¡Déjanos tu opinión en los comentarios o en nuestro perfil de Instagram!